Buena fiesta de Pascua

Publicado el : 17 de abril de 2019

“El es nuestra paz, el que de dos hizo uno, derribando con su cuerpo el muro divisorio, la hostilidad” Ef 2,14

¿Quién nos hará rodar la piedra? Esta es la pregunta que se hacían las mujeres camino a la tumba de Jesús en la mañana de Pascua.

Esta es la pregunta que nos hacemos nosotras mismas cuando nos tomamos el tiempo de detenernos y mirar el mundo que nos rodea: todas esas piedras erigidas por personas en muros que se cierran, paralizan y aplastan. Piedras- proyectiles que alcanzan a los demás, lesionan y destruyen.

En la mañana de Pascua, lo inconcebible sale a la luz: la piedra no cumplió su misión, no detuvo al muerto. La piedra está movida. El muerto se ha levantado.

En la mañana de Pascua, los discípulos experimentaron la alegría de encontrarse con el Viviente.

A nosotros, herederos de esta piedra rodada, nos toca dar testimonio de que lo imposible no existe; que la vida es más fuerte que la muerte.

Cristo ha resucitado! A través de él y con él todo se salva para una nueva vida.